El Ministerio de Asuntos Exteriores emitió este martes un comunicado en el que "condena el ataque de Israel que ha causado la muerte de seis periodistas en Gaza", entre ellos la de Anas Al Sharif y parte de su equipo, a quien Israel acusa de ser miembro del brazo operativo de Hamás.
Según el texto de Exteriores, "casi 200 periodistas han muerto en la Franja desde el inicio del conflicto" y "el derecho a la información es esencial para garantizar la libertad de expresión y el acceso a la información de todos los ciudadanos".
El Gobierno español subraya que "los ataques contra periodistas constituyen una grave violación del derecho internacional humanitario que no debe quedar impune". Con esta declaración, España se suma a las voces internacionales que denuncian el elevado número de profesionales de la comunicación muertos en la Franja desde el 7 de octubre.
Sin embargo, el comunicado de Exteriores no recoge las alegaciones israelíes sobre que uno de los periodistas fallecidos, Al Sharif, corresponsal de Al Jazeera, trabajaba de forma encubierta para Hamás.

Según los servicios de inteligencia israelíes, el reportero mantenía desde el 7 de octubre un patrón persistente de apoyo público a la organización terrorista y de identificación con su causa, llegando incluso a ser acusado de difundir libelos desde Gaza contra Israel en el contexto de la guerra. La documentación difundida por Israel contiene asimismo el número de miembro de Hamás y la unidad para la que presuntamente trabajaba.
Israel asegura en base a esa documentación que Al Sharif fue reclutado por Hamás el 3 de diciembre de 2013 y se desempeñó como comandante de un escuadrón de lanzamiento de cohetes en el sector norte. Su número personal es 305342.

En su respuesta, Israel sostiene que el objetivo del ataque no era silenciar la labor informativa, sino neutralizar a un agente operativo de Hamás que utilizaba su estatus periodístico como cobertura.
Las afirmaciones han sido rechazadas por la cadena qatarí y por organismos de defensa de la libertad de prensa, que insisten en que la condición de periodista debe ser protegida en cualquier circunstancia ▪
