La comunidad judía de la capital catalana conmemora esta semana el aniversario de la masacre del 7 de octubre con dos actos distintos, uno impulsado por israelíes residentes y celebrado el domingo en el Parque Turó, y otro convocado por la Comunitat Jueva de Barcelona (CJB) —antiguamente conocida como CIB— que tendrá lugar mañana jueves.
Ambos encuentros buscan recordar a las víctimas del ataque perpetrado por Hamás en 2023, aunque con formatos y enfoques diferentes, y coinciden con la entrada en vigor del plan de pacificación del presidente Donald Trump, que ha devuelto a Israel los veinte rehenes que aún quedaban con vida en Gaza.
"Otro 7 de octubre ha pasado, y no dejamos de recordar a cada una de las víctimas de la masacre, así como a los rehenes que aún permanecen en Gaza pero Be’H por regresar", decía el mensaje de la Comunitat Jueva, difundido antes de la liberación de los últimos rehenes vivos. En la franja han quedado 21 israelíes a los que el Ejército da por muertos pero que también deben ser devueltos a Israel.
En línea con ese plan, el mensaje de la CJB, difundido a través de grupos judíos en redes sociales, añade que "este nuevo 5786 llega cargado de esperanza, con un nuevo acuerdo de paz que renueva nuestra fe y nos invita a todos a soñar con el día en que podamos celebrar juntos, en comunidad".
El acto, bajo inscripción obligatoria por razones de seguridad y aforo, cuenta con el respaldo de varios instituciones y comunidades judías de Barcelona, entre ellas la israelí "Juntos", y las representantes locales de instituciones como BBYO, Mozaika, Mem Global o Lazos.
Según algunas fuentes, a la ceremonia han sido invitados representantes políticos de distintos partidos, extremo que han negado desde la CJB, además de líderes de organizaciones judías locales y nacionales.
Vigilia israelí en el Parque Turó
El primer acto, menos institucional, se celebró el domingo 12 de octubre en el Parque Turó, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, bajo el lema "Dos años en el infierno, bienvenidos a casa", una referencia al retorno que ya estaba previsto de los veinte rehenes israelíes.
Una fuente consultada dijo que la convocatoria fue impulsada por un grupo de israelíes que viven en Sant Cugat, y reunió a entre 50 y 80 personas en un ambiente de recogimiento y solidaridad, y contó con la participación de israelíes, judíos locales, y también amigos de Israel.
Durante la vigilia, los asistentes colgaron entre los árboles del parque carteles con fotografías de los secuestrados por Hamás y mensajes que pedían su liberación.
Algunos de los participantes portaban banderas de Israel y pancartas de apoyo a las familias de los cautivos. En el cartel difundido para la ocasión se podía leer, sobre una composición de rostros de los rehenes, el lema en letras negras y amarillas: "Dos años en el infierno".
El encuentro fue descrito por sus organizadores como un acto de unidad y memoria. "Standing together" —"de pie juntos"— fue la consigna elegida para el cartel, en el que se invitaba a los asistentes a llevar banderas, palos y pancartas personales.
Ambos actos, aunque organizados por distintos grupos, reflejan un sentimiento común de duelo y solidaridad. En uno y otro espacio, la comunidad judía e israelí de Barcelona busca mantener viva la memoria de las víctimas y mostrar apoyo a las familias de los rehenes que, aunque sin vida, aún permanecen en manos de Hamás.
Una decena de actos de recuerdo por toda España
Con el acto de Barcelona se cierran en España las conmemoraciones organizadas por círculos comunitarios y las distintas asociaciones de Amistad con Israel, que comenzaron en Madrid el 5 de octubre y han tenido lugar en varias ciudades.
En Madrid tuvieron lugar dos actos, el primer organizado por la CJM y apoyado por las demás comunidades y organizaciones, que tuvo lugar en Alcobendas con la participación de la alcaldesa de esa ciudad, Rocía García Alcántara, y una vigilia espontánea frente a la Puerta de Alcalá el mismo día 7.

En Valencia, la Asociación de Amistad Comunitat Valenciana–Israel (ACVI) organizó el acto "7 de octubre 2025: Memoria viva" en la sede de la nueva comunidad reformista Shir Jadash, bajo el lema "Si te hubiera pasado a ti, ¿qué habrías hecho?". La iniciativa, celebrada bajo estricta seguridad, contó con la co-participación o auspicio del Movimiento contra la Intolerancia, la Amistad Judeo-Cristiana y una decena de asociaciones de amistad de todo el país, según la convocatoria.
En este acto participó la presidenta de las Cortes Valencianas, Llanos Massó, quien después, en un mensaje por redes, pidió "Memoria, dignidad y justicia" con las víctimas de los atentados.

Paralelamente, el colectivo israelí Hatikvá llevó a cabo otro encuentro, con medio centenar de personas, en el que se proyecto el documental "Torn" y se habló del antisemitismo en las escuelas.
En Murcia, medio centenar de personas participaron en la Plaza de Santo Domingo en un acto convocado por la Asociación de Amistad Murcia–Israel (ASAMI) para rendir homenaje a las víctimas y pedir la liberación inmediata de los rehenes.
El acto, que transcurrió sin incidentes gracias a la protección policial, incluyó la lectura de un manifiesto que recordaba la masacre del 7 de octubre como "una atrocidad planificada que asesinó a más de 1.200 personas, la mayoría civiles".

La Comunidad Judía del Principado de Asturias "Beit Emuná" y la Asociación Asturiana de Amigos de Israel también organizaron una concentración en Oviedo que reunió a unas cincuenta personas en la Plaza de La Escandalera, con la presencia de miembros de ambas organizaciones, simpatizantes y representantes locales de VOX. Durante la ceremonia leyeron los nombres de los secuestrados y pidieron fortaleza para ellos y sus familias.

Y en Palma de Mallorca, que había prevista una concentración el pasado domingo, el acto institucional comunitario fue cancelado en el último momento debido a advertencias del servicio meteorológico ▪