Madrid acoge desde este lunes la Conferencia Anual de la European Jewish Association (EJA), que reúne a más de un centenar de líderes comunitarios y expertos para abordar el incierto futuro del judaísmo europeo en un contexto marcado por el auge del antisemitismo.
"Desgraciadamente, miles de judíos han preferido marcharse a Israel, a pesar de estar en guerra, que quedarse en Europa. Eso dice algo", dijo en la sesión de apertura el presidente de la EJA, rabino Menachem Margolin, en un mensaje contundente de alerta.
La cita, que se celebra bajo el título "¿Construir o marcharse? Tiempo de decisión para los judíos europeos", plantea una disyuntiva existencial para las comunidades judías del continente, que enfrentan una presión creciente tanto por motivos de seguridad como de su propia supervivencia.
"Antisionismo es antisemitismo"
"Este año ha sido muy difícil para todos nosotros", lamentó Margolin, que denunció que "el antisionismo está en su nivel más alto desde la Segunda Guerra Mundial" antes de señalar: "No podemos ignorar que el antisionismo es antisemitismo. Es muy impactante que Europa haya vuelto a esto".
El 82% de los europeos no prioriza la lucha contra el antisemitismo, sólo el 18,4% lo ven como una cuestión de política nacional. Pero cuando se enmarca como una cuestión de seguridad y protección civil, entonces se eleva al 40,3%, según una encuesta dada a conocer el este foro.
Otro de los datos de la encuesta realizada en 6 países europeos, entre ellos España, indica que el 55% de los europeos dijo que la percepción de los judíos ha empeorado debido al conflicto israelo-palestino. Efecto que es más severo en los grupos de mayor edad entre, donde se eleva al 66% (55-65 años).
Según el rabino, muchas comunidades se ven obligadas a invertir cantidades sin precedentes en protección diaria de escuelas, sinagogas y espacios comunitarios. "Muchos estudiantes son amenazados simplemente por ser llamados sionistas", explicó. El sentimiento de inseguridad, sumado a la normalización de discursos hostiles, está llevando a un número creciente de judíos europeos a replantearse su permanencia en el continente.

Primera vez en Madrid
La conferencia, que se celebra por primera vez en Madrid, busca ofrecer un espacio de debate y reflexión sobre el papel del judaísmo en Europa y las medidas necesarias para garantizar su continuidad. Participan representantes de instituciones europeas, expertos en derechos humanos y un centenar de líderes de comunidades judías de toda Europa.
De las comunidades españolas, estaban presentes los presidentes de la Comunidad Judía de Madrid (CJM), Estrella Bengio;, de la Israelita de Barcelona (CIB), Raymond Forado; de la Israelita de Melilla, Mordejay Guanich; y otros. También participaba el presidente de LICRA Barcelona, Isaac Levy.
El presidente de la Federación de Comunidades Judías de España, David Obadía, se ausentó del evento por un "inconveniente" y envió un mensaje de video grabado de antemano en el que aseguraba que "estamos trabajando duramente para intentar defender todos los derechos de cada uno de los judíos españoles y sus comunidades".

Ejes del encuentro
A lo largo de dos jornadas, se abordarán temas clave como la libertad religiosa, la convivencia, el legado histórico, el vínculo con Israel y los retos educativos frente al discurso de odio.
El foro se enmarca en un momento crítico, tras meses de tensión en Europa a raíz del conflicto en Gaza y del recrudecimiento del antisemitismo, con incidentes, amenazas y discursos negacionistas. La pregunta planteada en el lema del evento -¿construir o marcharse?- ya está siendo respondida, en parte, con decisiones personales que reflejan una pérdida de confianza en el entorno europeo. La tarea de los líderes reunidos en Madrid será evitar que esa tendencia se convierta en norma▪