En plena ola de violencia que afecta al pueblo judío en todo el mundo, incluida España, la Comunidad Judía de Barcelona (CIB) ha lanzado un manual práctico en redes sociales para ayudar a identificar comportamientos y discursos antisemitas, incluso entre quienes creen no ser antijudíos.
El manual apela, con un grado de sarcasmo y tono provocador, a aquellos que "sean antijudíos sin saberlo", para que "al menos pueda reconocerlo". La publicación se realizó a través de la cuenta oficial de la comunidad en X (antes Twitter), donde se enumeran reglas sencillas y directas que alertan sobre actitudes discriminatorias hacia los judíos.
Señales claras de antisemitismo
El manual destaca varias conductas cotidianas que podrían considerarse antisemitas, aun sin intención consciente. Entre ellas, la comunidad subraya que hablar de un "super lobby" que controla todo, o negar el derecho de Israel a existir o defenderse, son formas de antisemitismo. También se advierte sobre el uso de amistades judías como justificación para criticar a otros judíos o al Estado de Israel: "Si presumes de tener ‘un amigo judío’ que te da la razón contra los judíos o Israel, como si hablara en nombre de todo el pueblo judío o del presidente de Israel. Eres antijudío", señala el post.
Otras situaciones señaladas incluyen culpar sistemáticamente al gobierno de Israel por cualquier hecho, centrarse únicamente en el sufrimiento del pueblo palestino y olvidar al israelí, o ignorar las amenazas crecientes hacia las escuelas y sinagogas judías, que requieren protección policial.
Críticas a la indiferencia y la hipocresía
La CIB advierte además sobre actitudes que, aunque puedan parecer neutrales, perpetúan el antisemitismo. Por ejemplo, excusar declaraciones populistas sobre genocidio o holocausto como "libertad de expresión", no pedir la liberación de secuestrados por Hamás, o participar en flotillas de apoyo para obtener visibilidad política son señaladas como conductas problemáticas.
"Si cuando decimos que las amenazas contra nuestra comunidad crecen, tú respondes que ‘no pasa nada’. Eres antijudío", enfatiza la CIB. La comunidad también critica la hipocresía de quienes intentan definir qué es o no antisemitismo para los propios judíos: "Y si además pretendes decidir por nosotros qué es o no es antisemitismo, quitándonos incluso ese derecho… eres antijudío".
Si se interpreta con tono irónico, el mensaje podría funcionar como una especie de espejo que refleja la lógica absurda del antisemitismo moderno, mostrando de manera directa cómo ciertas actitudes que muchos consideran inocuas perpetúan prejuicios y discriminación ▪