Tras la devolución por la organización terrorista Hamás de los restos de Shiri, Ariel y Kfir, las ciudades de Madrid y Torrelodones se vistieron de naranja en un homenaje a la familia Bibas en un acto de solidaridad replicado en diferentes capitales y ciudades del mundo.
"Esta noche iluminamos la Real Casa de Correos en recuerdo de Ariel y Kfir Bibas. Esta semana se ha conocido que este bebé y este niño pequeño, hermanos, han sido brutalmente asesinados por Hamás. También han matado a su madre", escribió por redes la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Un día antes, Almudena Negro, alcaldesa de Torrelodones, a unos 26 kilómetros de Madrid, se había sumado al "inmenso dolor" del pueblo de Israel por el cruel asesinato de los niños Bibás" también en otro mensaje en el que anunciaba que la famosa Torre de los Lodones de la ciudad lucirá en color naranja hasta hoy domingo. Un post que concluía con la demanda de que todos los rehenes aún en Gaza sean liberados inmediatamente.
El ejemplo de Madrid sirvió de catalizador para que en círculos judíos y pro-israelíes barceloneses se quejaran por redes sociales de que esa ciudad no se hubiera sumado al homenaje internacional por la tragedia de los Bibás.
La familia fue capturada con vida por terroristas palestinos durante la masacre del 7-O. El padre, Yardén, fue liberado el 1 de febrero y, este pasado jueves y viernes, Hamás entregó los restos de los otros tres miembros de la familia, tras entregar un primer cadáver de Shiri que correspondía a otra persona, una gazatí. La autopsia reveló que los tres fueron asesinados a sangre fría por sus captures poco después, quizás semanas, de ser secuestrados con otros 252 israelíes y extranjeros▪

