Una protesta en Figueres interrumpió brevemente el paso del equipo Israel Premier Tech durante la quinta etapa de la competición. Los organizadores han anunciado que denunciarán los hechos, mientras que el equipo israelí insiste en que es una formación privada sin vínculos con el gobierno de Biniamín Netanyahu.
Un pequeño grupo de unos cinco manifestantes interrumpió este miércoles la contrarreloj por equipos de La Vuelta a España con una protesta en favor de los plaestinos y contra un supuesto "genocidio" en Gaza. El incidente se produjo en el tramo de Figueres (Girona), cuando el equipo Israel Premier Tech se disponía a iniciar su participación en la quinta etapa.
Los manifestantes ondearon una bandera palestina y portaban una pancarta en la que se leía: "La neutralidad es complicidad. Boicot a Israel", con la que trataron de impedir el avance de los ciclistas, informó elDiario.es.
Agentes de los Mossos d’Esquadra intervinieron rápidamente para disolver la cadena humana y permitir el paso de los corredores. La acción apenas retrasó unos segundos la carrera. La agencia ACN informó que varios manifestantes fueron identificados y al menos uno detenido.
Los comentaristas de RTVE contra Israel
La protesta fue captada en directo por Teledeporte. El comentarista de RTVE, Carlos de Andrés, narró cómo las motos de seguridad "rompieron" la formación de los manifestantes. Posteriormente añadió: "Me parece muy lícito. Yo estoy absolutamente a favor de todo… de luchar contra el tremendo genocidio que está cometiendo Israel contra Palestina". Sin embargo, también cuestionó la forma de la acción: "Han aprovechado un momento en que… controlar todo el recorrido es absolutamente imposible. Pero afecta solo a un equipo".
Más allá de la protesta, la jornada estuvo marcada por otra controversia. En el momento en que el equipo Israel Premier Tech tomó la salida en Figueres, la realización de RTVE cortó la transmisión y dio paso a publicidad. Muchos espectadores interpretaron la decisión como un intento de evitar que se escuchara la sonora pitada que el público lanzó contra los ciclistas israelíes.
El director de La Vuelta a España, Javier Guillén, reaccionó con firmeza. "No podemos permitir lo que ha pasado", declaró a los medios, al anunciar que la organización presentará una denuncia. Guillén justificó la medida por motivos de seguridad de los deportistas y calificó la protesta como violenta: "Cuando se reivindica con violencia, deja de ser una causa justa".

El debate sobre la participación de Israel
Guillén había reconocido en una entrevista reciente con Mundo Deportivo que la presencia del Israel Premier Tech arrastra polémica, pero defendió su continuidad por criterios deportivos: "No somos ajenos a lo que pasa, pero no los podemos expulsar". El equipo, primer conjunto profesional israelí, está financiado por los empresarios Sylvan Adams y Ron Baron.
Durante la quinta etapa, la primera disputada en territorio español, también se avistaron numerosas banderas palestinas a lo largo del recorrido, como ya ocurrió el año pasado. La situación evidenció cómo la guerra en Gaza se proyecta sobre eventos deportivos internacionales, generando tensiones más allá del ámbito estrictamente deportivo.
Antes del incidente, Israel Premier Tech había remitido declaraciones a elDiario.es en las que marcaba distancia con el gobierno israelí: "Somos un equipo ciclista privado que no recibe financiación de ninguna organización gubernamental". La formación recordó que su participación en La Vuelta se debe a una "invitación obligatoria" que reciben en todas las grandes vueltas del calendario internacional.

"Nos centramos en el deporte"
En ese mismo comunicado, el equipo defendió su carácter internacional: "Contamos con ciclistas de 14 países diferentes, incluido Israel, y creemos profundamente en la capacidad del deporte para unir a las personas y cambiar sus vidas para mejor". También destacaron su labor social en África: "Por eso construimos el centro ciclista Field of Dreams en Ruanda, que ha llevado alegría y oportunidades a miles de niños".
Respecto a las críticas por la guerra, el equipo aseguró: "Israel Premier Tech respeta el derecho de todos a la libertad de expresión, pero como equipo ciclista profesional, nos centramos en el deporte".
La formación quiso subrayar que en Israel también promueven el desarrollo del ciclismo "para todos, independientemente de su religión o procedencia".
En paralelo, la organización de La Vuelta se enfrenta ahora al reto de garantizar la seguridad en lo que resta de competición, mientras se mantiene la tensión por la participación del conjunto israelí y las manifestaciones que previsiblemente seguirán acompañando su presencia en carreteras españolas ▪