Shlomo Sror, de 58 años, uno de los ocho israelíes expulsados el pasado martes de la terraza del restaurante Mimassa, en la ciudad gallega de Vigo, asegura que no tuvieron miedo cuando se vieron atacados por el propietario de origen libanés Samir Slim, y agradeció el respaldo que han recibido de distintos grupos en España y, sobre todo, al ciudadano madrileño que presentó la denuncia a la Policía.
En declaraciones exclusivas a Enfoque Judío, Sror narró en primera persona lo sucedido, denunciando una agresión verbal cargada de antisemitismo y odio, mientras el grupo se encontraba de paso por la ciudad como parte de un crucero turístico.
"Quiero que quede claro: no tuvimos miedo. Cuando nos preguntó de dónde veníamos, le dijimos con orgullo que éramos israelíes", comienza relatando Sror, quien no oculta que se vieron sorprendidos por la reacción del propietario del local.
El vídeo que éste grabó echándoles del restaurante se ha viralizado dando lugar a una ola de mensajes de tanto de apoyo como de condenas, que además ha conducido a la apertura de una investigación policial por un presunto delito de odio.

Escala en Biblao
Desde la ciudad de Bilbao, donde el viernes hacía escala el crucero de una semana que habían tomado en Southamptom, Sror contó que no tenían siquiera constancia de la polémica que se había levantado a su alrededor y que el vídeo difundido habla por sí solo.
"Él se alteró, gritó, pero nosotros no respondimos con violencia. Estamos en el extranjero y no queríamos un conflicto mayor, por lo que nos fuimos tranquilamente tras ofrecerle pagar las bebidas que nos había servido", señaló el israelí.
"Pero sí le dijimos desde la distancia, unas decenas de metros, ‘¡Viva Israel!’ y ‘Israel is good’, y que estaba manipulado por los medios, que no conoce la verdad.".
El grupo afectado está compuesto porcuatro parejas de amigos muy cercanos, "más que familia", todos ellos originarios de Ramle y residentes actualmente en la vecina Shoham.
"Cada año organizamos un crucero de ocho días y en este viaje la primera parada fue en Vigo, tras zarpar desde Southampton, en Inglaterra. Paseamos por la ciudad, hicimos algunos tours, y luego decidimos sentarnos a tomar unas cervezas. Somos religiosos y comemos kosher, pero no hay problema con la cerveza, así que pedimos y nos sentamos. Todo transcurría con normalidad".
Asalto inesperado
Fue entonces cuando el dueño del local se acercó y les preguntó si venían de Turquía. "Le respondimos que éramos de Israel, con orgullo".
"En ese momento uno de los amigos del grupo, Avishai, comentó: ‘Creo que nos quiere echar’. Al principio no lo creímos. Luego el hombre entró al restaurante y salió teléfono en mano gritando, insultándonos, diciéndonos que nos fuéramos, y repitiendo ‘¡Palestina, Palestina!’".
Sror asegura que pese al ataque intentaron mantener la calma. "Nos quedamos en shock. Nos levantamos y nos fuimos. Pero él siguió gritándonos. Solo al final, cuando ya nos alejábamos, le gritamos desde varios metros de distancia ‘¡Viva Israel!’"
El israelí afirma que no existió ningún diálogo con el hostelero. "Se abalanzó sobre nosotros de forma brutal. No hubo discusión. Apenas supo que éramos israelíes, estalló. Nosotros no lo provocamos. Incluso intentamos pagar, pero gritó que no quería nuestro dinero".

Ambiente hostil en la calle
Sobre el video que se viralizó tras los hechos, Sror cree que fue editado por el propio hostelero. "Entiendo que salió primero a averiguar quiénes éramos y luego volvió con el teléfono para grabar. Cortó nuestras voces y también el momento en que él grita algo sobre Hezbolá."
Sror también describe el ambiente hostil que percibió en la calle de parte de otras personas que fueron testigo de los hechos: "Vi las caras de la gente. Un nivel de odio contra Israel totalmente desproporcionado. Hay una influencia muy fuerte de los medios financiados por Catar, y en España la situación es peor que en otros lugares".
Consciente de que se encontraban en un país extranjero, el grupo optó por evitar cualquier enfrentamiento. "No conocemos las leyes aquí y, aparte, queríamos mantener el buen ánimo del viaje. Mi esposa quiere disfrutar, no vinimos a tener problemas. Pero tampoco somos ingenuos: si hubiera pasado algo más grave, habríamos llamado a la policía".
Informado por Enfoque Judío de que se ha abierto una investigación en España a raíz de la llamada a la Policía de un vecino de Madrid, Alfredo Nathan P.R., Sror pidió agradecer a todos el respaldo recibido, especialmente al denunciante, y asegura que está dispuesto a colaborar en cualquier acción legal que se emprenda. "Si hay que demandarlo, estoy dispuesto a firmar lo que sea. Lo importante es que la Policía avance en la investigación. Que sepa que el pueblo judío no se queda callado" ▪