La Comunidad Israelí de Madrid (ICM) ha participado este fin de semana en el III Encuentro de Líderes de Comunidades Israelíes en Europa, que ha reunido en Budapest a más de 70 dirigentes comunitarios de todo el continente.
La iniciativa fue impulsada por el Departamento para el Vínculo con los Israelíes en la Diáspora, dependiente de la Organización Sionista Mundial, y Mosaic United – Ministerio de la Diáspora de Israel, en colaboración con la red de comunidades ICE y el movimiento juvenil Tzofim Tzabar Europa. El objetivo central del encuentro fue reforzar los lazos entre comunidades israelíes dispersas por Europa.
Yigal Nisel, director general de Mosaic United, abrió el encuentro con una intervención centrada en "el poder de la conexión comunitaria". Por su parte, Gusti Yehoshua Braverman, directora del Departamento para Israelíes en la Diáspora, subrayó "la visión estratégica a largo plazo" que motiva estos espacios de intercambio.
Durante tres días, los participantes compartieron experiencias y desafíos comunes en talleres, sesiones de trabajo y espacios informales como un cálido Kabalat Shabat, seguido por un Oneg Shabat liderado por el actor israelí Dvir Benedek, quien también condujo un taller creativo destinado a "descubrir lo que nos une, más allá de las distancias geográficas".
Omer Shalev, director del Departamento para Israelíes en la Diáspora, ofreció una reflexión sobre el papel de estas comunidades como puente entre Israel y el mundo judío global: "El vínculo entre los israelíes en Europa y las comunidades judías locales puede ser más fuerte y significativo de lo que muchos imaginan".
La directora de ICM, Yifat Tzaig, destacó sobre le encuentro que "han sido días intensos, de conexiones genuinas, aprendizaje mutuo y reflexión sobre el legado que queremos construir".
Tzaig presentó el proyecto educativo de la escuela comunitaria Ofek, un Sunday school pionero en España que enseña hebreo y cultura israelí a hijos de israelíes en la diáspora. El centro, que este mes concluye su primer curso con 38 alumnos entre 3 y 10 años, "es un ejemplo del compromiso de ICM con la continuidad cultural y lingüística", explicó.
"El reto es pensar qué legado queremos dejar a las próximas generaciones y cómo consolidar una identidad judía con carácter israelí, viva, hebrea y conectada con sus raíces", concluyó.
Del movimiento juvenil Tzofim en Madrid no se traladó a Budapest ningún representante local, pero una fuente dijo que estuvieron representados por los líderes de Tzofim Tzabar Europa.
En los últimos cinco años, miles de israelíes han abandonado Israel por motivos políticos, económicos o como consecuencia de la guerra iniciada el 7 de octubre de 2023. Solo en el último año, más de 80.000 personas dejaron el país. La alta concentración de israelíes en Madrid propició, por primera vez, la creación de una comunidad organizada, que dio origen a ICM hace apenas dos años ▪
