Silvia Orriols crece en Cataluña con apoyo a Israel y respeto a la comunidad judía.
El envío de un buque de la Armada española para escoltar la flotilla pro-Hamás sitúa al Gobierno de Pedro Sánchez en el centro de la polémica nacional e internacional. Esta maniobra, vista por amplios sectores como un gesto de confrontación hacia Israel, no solo tensiona las relaciones exteriores de España, sino que puede arrastrar también a sus socios parlamentarios. En Cataluña, por ejemplo, Junts debería explicar por qué sigue sosteniendo a un Ejecutivo que adopta posiciones tan contrarias a la simpatía mayoritaria entre los militantes y votantes de ese partido hacia la comunidad judía e Israel.
Encuestas que marcan el retroceso de Junts
Los últimos sondeos confirman un desplome electoral de Junts en Cataluña, incapaz de justificar ante sus votantes el respaldo a un Gobierno debilitado por escándalos de corrupción y por decisiones nacionales e internacionales cuestionadas.
Según el panel Sigma Dos para El Mundo, Junts caería de sus actuales 35 diputados a entre 24-26 escaños, mientras Aliança Catalana ascendería de 2 a 11-14 diputados, con un crecimiento estimado de 6 puntos porcentuales.
En otra encuesta para La Vanguardia, Ipsos sitúa a Junts con apenas 21 diputados, perdiendo 14 escaños, y a la coalición formada por Aliança Catalana y Vox sumando un 24 % en conjunto, lo que tensiona la gobernabilidad catalana.
El "efecto flotilla": una fractura con Israel y con la comunidad judía
La decisión de Sánchez de enviar la Armada a escoltar una flotilla pro-Hamás ha sido interpretada por Israel como un desafío explícito, y es a todas luces una concesión simbólica a movimientos vinculados a intereses radicales y que mantienen vínculos con una organización terrorista. Una provocación.
Sin entrar en los riesgos de índole militar, esa estrategia coloca a España en riesgo de confrontaciones diplomáticas e incluso represalias políticas, y enciende alarmas dentro de la comunidad judía catalana. Muchos observamos con preocupación cómo Junts, al mantener alianza con el Ejecutivo de Sánchez, se distancia de décadas de convivencia y respeto.
Firme apoyo a Israel y respeto hacia los judíos catalanes
En contraposición, Silvia Orriols, presidenta de Aliança Catalana, ha manifestado con claridad su apoyo al Estado de Israel en un momento de máxima tensión internacional, así como su reconocimiento y respeto hacia los judíos que residen en Cataluña.
Este gesto conecta con un amplio sector social que valora la aportación cultural, económica y espiritual de la comunidad judía catalana. Bajo su liderazgo, Aliança Catalana se posiciona como un actor político que evita la ambigüedad: firmeza frente al antisemitismo, defensa de la minoría judía y compromiso real con la convivencia.
Junts: de partido histórico a socio de un gobierno suicida
Al sostener a Pedro Sánchez en Madrid, Junts no solo se asocia con un Ejecutivo en caída libre, sino que se distancia de valores fundamentales de respeto y diálogo con el pueblo judío.
Si persiste en esa línea, pasará a la historia como el partido que prefirió acompañar un gobierno suicida y una flotilla polémica, en lugar de defender los intereses de Cataluña y mantener la dignidad frente a Israel y la comunidad judía.
Cataluña no olvidará a quienes eligieron navegar en un barco que confronta a Israel y desprecia la sensibilidad de la comunidad judía. El futuro pertenece a quienes defienden con firmeza la dignidad de Cataluña, el respeto a sus comunidades y la amistad con el pueblo de Israel ▪
Rafaela Almeida, nacida en Brasil y nacionalizada española, es empresaria, escritora, educadora y presentadora de televisión. Es autora del libro Comunicación Internacional y Relaciones Públicas (Editorial Base, 2023), obra recomendada por la Escuela Diplomática de España. Ha alzado la voz contra el antisemitismo en charlas TEDx y en medios nacionales e internacionales. Actualmente estudia Relaciones Internacionales en la UOC.
