La gerente de la inmobiliaria Paloma Real Estate en Ibiza, identificada como Cristina Palomo Toro, canceló la reserva de un chalet a clientes judíos franco-israelíes tras descubrir que algunos de ellos procedían de Israel, según las publicaciones de influencers fidedignos en redes sociales y la imagen de una conversación de whatsapp que ha trascendido.
El mensaje que envió por Whatsapp a los clientes fue directo: "No sois bienvenidos hasta que cese el genocidio en Palestina", según la cuenta @SwordOfSalomon. Añadió además que entregaría el depósito de 2.500 € a "Palestina" y, acto seguido, bloqueó a los clientes en todos los canales de comunicación.
El incidente comenzó cuando uno de los jóvenes clientes consultó sobre la posibilidad de una cancelación parcial, ya que dos de los seis invitados no podrían viajar por motivos personales relacionados con la guerra. Explicó que serían reemplazados por dos amigos franceses. Y en ese momento la agente insistió en conocer el país de origen de los dos clientes y se percató de que eran de Israel, por lo que de forma unilateral decidió cancelar la reserva.
Las fuentes añaden que, tras su anuncio al cliente que se escribía con ella, Toro modificó la foto de portada de su cuenta de Facebook por una bandera con el lema "Free Palestine".
Según la legislación española y europea, la cancelación de la reserva constituye discriminación por razón de nacionalidad y religión. También se plantea la posibilidad de un fraude en el manejo del depósito, que en este caso ascendía a 2.500 euros.
No obstante, más tarde, según uno de los posts, la propietaria devolvió el depósito a los clientes franco-israelíes al percatarse de la gravedad de sus actos y de que el caso se había hecho viral.
La viralización llevó a la gerente a denunciar por redes sociales que había recibido amenazas "del pueblo judío", generando una cadena de post antisemitas.
El caso se suma a otras denuncias recientes de hostilidad hacia turistas israelíes o judíos en España –como el de un grupo israelí expulsado de un restaurante en Vigo-, generando un intenso debate sobre los límites legales y éticos de la actuación de empresas y particulares en el sector turístico.
También consta el caso de un grupo de adolescentes judíos franceses desembarcados de un avión de Vueling en circunstancias aún por aclarar, pero que los damnificados atribuyen a un claro caso de antisemitismo.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no se ha pronunciado hasta ahora sobre el agravamiento del antisemitismo en España desde que comenzó la guerra en Gaza hace casi dos años ▪
