30 diciembre 2025
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BRING THEM HOME NOW

Actualidad y Cultura del Judaísmo en España

AÚN QUEDA
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Firmas

La pregunta que me siguió desde Berlín

Es humillante que te odien solo por ser quien eres. Esa vergüenza me conectó con el sentimiento que han cargado los judíos a lo largo de los siglos.

Joana Escamilla Lerner

Era un duro día de invierno berlinés en 2014 y una amiga y yo nos unimos a un tour a pie para conocer la historia de la ciudad. La guía, una amable inglesa rubia, nos mostraba las calles mientras hablaba del protagonismo de Berlín en la Segunda Guerra Mundial.

En cierto momento, hizo una pregunta que me marcó profundamente: —¿Quién de ustedes habría ayudado a los judíos durante la persecución nazi? Todos los asistentes levantamos la mano. Ella, con calma, respondió:  —Por probabilidad, no lo habrían hecho.

Esa frase se quedó resonando en mi cabeza. ¿Habría arriesgado mi vida por ayudar a otros en una situación así, si no me estuvieran persiguiendo a mí directamente? Me lo preguntaba siendo la orgullosa nieta de un judío polaco, afectado de forma directa por la Segunda Guerra Mundial.

Poco sabía yo que, casi diez años después, me vería viviendo en la pintoresca ciudad de Barcelona, en un contexto de antisemitismo creciente tras el 7 de octubre de 2023. Pintadas, pegatinas, comentarios, manifestaciones y noticias sesgadas antisemitas inundaban mi rutina diaria… y aquella pregunta de Berlín retumbaba de nuevo. Sentía que no podía quedarme callada. No quería que la pregunta de Berlín quedara solo en mi memoria; necesitaba responderla con mis actos.



Asistí, con otros tres compañeros, a una manifestación llamada Acampada por Palestina, donde coreaban: "Desde el río hasta el mar, Palestina vencerá", un lema que pedía la desaparición del Estado judío. Llevábamos un cartel que decía: "Bring them home""Traedlos a casa". Los manifestantes nos miraron sorprendidos; no esperaban ningún tipo de resistencia. Éramos pocos frente a muchos, pero permanecimos en silencio.

Claramente estaban molestos. ¿Qué les incomodaba? ¿Acaso decíamos alguna mentira? Solo estábamos allí para recordar que Hamás tenía a los nuestros secuestrados, que no los olvidamos y que los queremos de regreso. Poco a poco fueron acercándose a hablarnos, pero no íbamos a entrar en discusiones. Nos arrinconaron; vi el odio en sus miradas, un odio que me caló el alma. Pero no tuve miedo. ¿Qué podrían hacerme? ¿Matarme? En ese momento, no, porque la policía estaba presente.

Uno de mis compañeros perdió la paciencia —algo comprensible, dadas las barbaridades que nos estaban diciendo y las mentiras que repetían como dogma sin cuestionar—. La policía intervino. Al principio, parecían molestos porque creían que habíamos ido a provocar. Yo no lo llamaría provocar: lo llamaría recordar. No nos retuvieron mucho; pronto vieron que éramos personas pacíficas y nos dejaron ir.

Volví a casa con un sentimiento de vergüenza. ¿Vergüenza por qué? ¿Realmente había ido a provocar? Me senté a analizarlo. No sé si respondí del todo a esa pregunta, pero sí entendí algo: entendí por qué tantos judíos que vivieron el Holocausto, la discriminación y otros pogromos eligieron callar. Entendí por qué mi abuelo guardó silencio, igual que tantos otros: para poder seguir adelante.

Es humillante que te odien solo por ser quien eres. Esa vergüenza me conectó con el sentimiento que han cargado los judíos a lo largo de los siglos. Comprendí la distopía en la que vivimos y, al mismo tiempo, me sentí orgullosa de resistir. Orgullosa de recordar que no callaré, que sé quién soy, de dónde vengo y hacia dónde voy.

Porque "Nunca más" no es solo un recuerdo del pasado: es ahora mismo. Y con esa convicción seguiré adelante, defendiendo la verdad y la justicia, sin permitir que el odio silencie mi voz ni mi identidad.

Y entonces, inevitablemente, volví a la pregunta de Berlín:  

—¿Quién de ustedes habría ayudado?

Y me pregunto: ¿Cuántos levantarían la mano hoy? ▪


Joana Escamilla Lerner es psiquiatra y doctora en Medicina. Actualmente vive en Barcelona, donde ejerce como psiquiatra clínica. Interesada en la historia de la psiquiatría, la salud mental en contextos transculturales y el impacto de las narrativas sociales, combina su labor asistencial con proyectos de investigación.

Las opiniones expresadas en este artículo son responsabilidad exclusiva de su autor
y no necesariamente reflejan la postura editorial de Enfoque Judío ni de sus editores.

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